
Es la blanca melodía en la caricia,
esa esencia para amar toda la vida…
el arrullo de la voz en los silencios,
y la dulce sensación de nuestros besos
Es jugar como la luz entre las sombras
es nacer de la pasión noches eternas…
es querer hasta morir sobre tu cuerpo,
y llegar a despertar entre los sueños
Somos pétalos de piel (sobre las manos)
el placer de ir a beber de nuestros senos…
ser mujer…y amanecer como los nardos
en los montes de tu ardiente desnudez!
Eileen
1 comentarios:
mario dijo...
Es precioso, me gusta!
Esa musa divina esta que hecha fuego!